Este artículo solo se puede escribir desde el sentimiento, no hay otra manera.  Y tampoco hay otra manera de escribirlo que no sea desde mi propia dura experiencia.
A los que hayan leído otros artículos míos —los cuales normalmente son más técnicos, y aunque pueda hablar de emociones y sentimientos lo hago desde la distancia— este les sorprenderá.
No es un artículo cómodo, pues seguro que va a remover muchas consciencias. Seguramente, igual que me ocurrió a mí, despertará sentimientos de culpa a muchas madres y padres. Pero mi intención no es hacer sentir culpable a nadie, sino que esto que describo en el artículo deje de ocurrir. Para los que conecten con la culpabilidad al final del artículo, también hablo de ello y comento maneras de afrontarlo, igual que lo he hecho yo.

Llevo más de 20 años haciendo distintos trabajos de crecimiento personal de diferentes tipos. Y ya había conectado otras veces con este episodio de mi primera infancia, pero a distancia. Esta vez entré a fondo y, como describo más abajo, me ha removido hasta puntos que poca gente se puede imaginar.

Hace años recordé una escena de mi infancia, de cuando tenía 8-10 meses. Me veía desde fuera, pues me observaba a mí mismo. La imagen era yo de pie en la camita de barandillas (la típica en que se pone a los niños cuando ya no se ponen en la cuna), apoyándome como podía en la barandilla del lado largo, y lloraba tendiendo los brazos, como invitando a que me cojan en brazos. No veo a quién le lloro, aunque intuyo que era mi madre. No hay sentimiento, solo sé muy profundamente que necesitaba desesperadamente que me cogieran en brazos.

La lactancia materna tiene mucho que ver con la consciencia. 

Es "reconocer" o no al ser que llega.

En otros artículos explicaré más cosas, pero en este quiero hacer referencia a un detalle técnico muy importante. La posición del bebe en el momento de la lactancia.

Puede parecer una tonteria, pero puede ser una de las claves en el éxito o no de la instauración de la lactancia. Muchas mujeros han tenido problemas, incluso hasta el punto de dejar la lactancia prematuramente por una mala postura.