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Red de cristales

En toda la superficie del planeta hay una red de cristales que ayuda a estabilizar la Consciencia Crística o Llama Trina en los seres Humanos.

Primero explicaré en que consiste, después que función tienen y como conectarse a ella, y después hablaremos de su historia.

La red está formada por cristales de cuarzo etéricos, de 1 a 5 metros. La mayoría de unos 2 metros de altura. Al ser etéricos no son visibles para la mayoría de personas, pero cuando están activos pueden ser visibles por las personas videntes.

Aunque siempre están funcionando, normalmente se mantienen a un ritmo muy bajo para «volar debajo del radar» y no ser detectados por entidades que querrían destruirlos porque quieren evitar la ascensión Humana.

Cuando se activan a plena actividad, emiten una Luz etérica muy potente que alcanza cualquier punto a su alrededor hasta conectar esta luz a la de los otros cristales cercanos, cubriendo de esta manera toda la superficie terrestre.

Funcionan en red de una forma parecida a Internet. Y de la misma manera están interconectados entre ellos de manera redundante. De esta manera, aunque alguno falle o sea destruido, el resto sigue manteniendo el vínculo entre ellos mismos y los Humanos conectados a la red.

Su función es doble.

En el modo estacionario (baja actividad) permite que los Humanos que están activando su «cristal» del corazón, Llama Trina o como se le quiera llamar, se conecten a ella y la energía de la red les ayuda a estabilizar su llama incipiente.

Y una vez ya han conseguido esa estabilización completa, estos mismos Humanos que ya no necesitarían de la red (se nutren ya del Ser interno directamente) mantienen la conexión para ayudar a estabilizar la Red en favor de los que aún están de camino.

Además, la red tiene otra función que es que cuando se «enciende»: Puede crear una muy potente emanación de Luz Líquida Consciente capaz de realizar distintas funciones según la necesidad del momento.

Puede generar un escudo adicional de protección de la superficie del planeta. (Ya existen otros escudos de protección instalados más específicamente para este fin, pero no es el tema de hoy).

Llama trina

Puede ayudar al despertar colectivo, con energía capaz de elevar la frecuencia de todos los seres vivos, y especialmente de los Humanos. Para este fin se activa cuando es necesario ese refuerzo en momentos clave.

Puede enviar información que inconscientemente es captada sí o si por todos los Humanos, mejorando sus paradigmas mentales. Eso sí, respetando siempre el libre albedrío. Sería como bajar «software» necesario para gestionar los nuevos momentos y paradigmas, pero el receptor tiene que «autorizar» su activación.

En definitiva, es una red capaz de gestionar enormes cantidades de energía consciente en toda la superficie del planeta a la vez. Y precisamente por ser energía consciente puede ser usada para muchas cosas, dependiendo de la necesidad del momento.

En la Atlántida, una red similar fue «tomada» por los que querían poseer y esclavizar a la Humanidad. Y la utilizaron para ese fin, hasta que fue destruida por los mismos que la habíamos construido para evitar ese mal uso.

Cuando se construyó la de la Atlántida nadie pensó que eso pudiera ocurrir, por lo que no había medidas de seguridad para evitar ser tomada.

Esta nueva red actual está muy protegida. Y también cada cristal individual en sí mismo, está programado para que NUNCA se puedan emplear hacia el lado oscuro. Por lo que incluso si llegaran a tomar el control de la red no podrían hacer nada con ella, pues solo se puede manejar desde la misma Consciencia Crística. Y «ellos» esta consciencia no la manejan.

Lo único que pueden hacer ahora es destruir alguno de los cristales. Pero actualmente (mayo del 2022) la red ya tiene un nivel de potencia y estabilidad tan grande que se puede autoproteger y cada día que pasa se reduce más ese riesgo.

Para conectarte a ella no hace falta saber que existe. Las personas que voluntariamente y desde su libre albedrío, de forma consciente o inconsciente, deciden conectarse a la Consciencia Crística, o VIDA, o AMOR, o cualquier nombre que signifique algo parecido, son «guiadas» a conectarse a ella.

Ellos no sabrán exactamente qué ha ocurrido. Pero si notarán una fuerte estabilización de estados internos más positivos, una sensación interna habitual de mejor «bienestar» interno, un sentimiento interno de que «todo está bien», un sentimiento profundo de «estar conectado a algo mayor positivo», una mayor facilidad para expresar y vivir en AMOR.

Pasado un tiempo ocurren dos cosas aparentemente contradictorias y por eso es importante ser consciente de esto.

Ese estado comentado se va consolidando y va siendo cada vez más un «estado común» de esa persona. Y eso se va haciendo evidente para las personas abiertas y sensibles de su entorno. Y esas personas del entorno además son «irradiadas» de manera que para ellas también se vuelve más fácil ese camino hacia ellas mismas, la «verdad», el AMOR, la Ascensión, etc.

Pero precisamente por el hecho de volverse algo usual, la persona se «acostumbra» a ese estado, y deja de sentir esa sensación de «subidón» y novedad del principio. Eso puede llevarla pensar que vuelve a estar igual que antes, y no es cierto, ha dado pasos relevantes, pero se han vuelto ya «normales».

Para evitar que esta sensación de desánimo ocurra, es importante observarse ahora y aquí, y de tanto en tanto mirar atrás hace unos meses o años y ver qué y cómo vivíamos las cosas entonces. Al hacer esta retrospección te das cuenta de que hay muchas cosas que han cambiado de forma sustancial y a mejor en cómo vives las cosas, las cosas que nos importan, como reaccionamos a cosas externas, etc.

Yo Soy

Al darte cuenta de eso, te ayuda a «confiar» en ti mismo y en el proceso que estás viviendo. A continuar. Ves que estás mejorando como persona, que estás viviendo y mostrando un «tú» mejor que el de hace un tiempo. Y eso siempre es señal de ir por buen camino.

Vamos a ver ahora su historia.

A principios del 2011 sentí un fuerte impulso interno de «hacer un trabajo» en un lugar sagrado que visite. Estaba solo y no tenía ni idea de lo que tenía que hacer. Eso sí, lleve conmigo unas puntas de cuarzo, que «sabía» que necesitaría.

Una vez allí cogí las puntas y empecé a hacer todo un proceso de lo que poco a poco fui entendiendo de que se trataba. “Manifestar» en el plano etérico un cristal del estilo de un cuarzo de unos 2 metros de altura. Estaba allí a mi vista, pero estaba «desactivado».

Después de mi interior surgían un montón de códigos que fui «introduciendo» en el cristal. Cuando acabe de introducir los códigos, el cristal se fue encendiendo poco a poco, hasta convertirse en un potente foco de luz etérica. Lo dejé así un tiempo, y luego lo «puse» en stand by. Seguía activo pero sin emitir luz.

En ese momento no tenía ni idea de para qué serviría, pero sabía que tenía que hacer lo que hice y también que lo tenía que dejar en «ralenti». Como otras veces en la vida ya me han pasado cosas de este estilo, de saber que tengo que hacer algo que no sé qué es o para qué sirve, y después con el tiempo he ido entendiendo que significaba la experiencia, no le di mucha importancia. Supuse que en algún momento sabría de qué iba aquello.

Pasado unos días me volvió a pasar lo mismo en otro lugar «especial». El proceso fue parecido, con la única diferencia que sentí que tenía que «trazar» un haz de luz (link) entre este cristal y el anterior. Y una vez establecido el link los dejé en stand by también.

Y aquí ya empecé a saber que era de máxima importancia dejarlos en stand-by para que no fueran detectados. También recibí internamente la consigna de que incluso tenía que procurar «no pensar» en todo este tema «por seguridad» para no ser detectado. Y que no debía hablar con absolutamente nadie de este tema. Que estaba en juego incluso mi vida y la de los que lo supieran. Ni siquiera mi mujer sabia nada de esto.

Poco a poco fui activando cristales en más sitios.

Algunos de ellos situados en puntos «muy potentes» energéticamente eran de casi 5 metros, pero lo habitual es que sean de unos 2 metros. Y también hay algunos de poco más de un metro.

Entonces entendí que los grandes comunican sectores grandes de la red entre sí directamente y los pequeños la red más local. Aunque los pequeños solos también son capaces de mantener la conexión a través de toda la rejilla que forman, la comunicación directa entre los grandes, al reducir el número de saltos entre cristales en comunicación a larga distancia, hace la red más rápida.

Al principio necesitaba casi una hora para cada uno, con la ayuda de las puntas y mucha concentración. Con el tiempo ya pude hacerlo mucho más rápido. Ahora lo hago en cinco minutos, sin puntas y sin siquiera cerrar los ojos para no llamar la atención. Creo que me he «entrenado» pero sobre todo creo que es porque al estar la red ya activa el proceso es más fácil.

Por mi trabajo «oficial» viajé por toda España, gran parte de Europa y en parte de Sudamérica. Aprovechando cada viaje para activar y conectar cristales en lugares a veces remotos. Y de esa manera la red se fue expandiendo por los dos continentes.

En el 2022, ya he activado cristales en los demás continentes sin ir físicamente. En este caso solo han sido links a otros cristales «maestros» de esos continentes que ya estaban activos. Y estos ya se conectarán con la red de su zona. Pero de esta manera se cierra la red en todo el planeta.

Durante un tiempo no supe muy bien para qué serviría, aunque intuía que tenía que ver con un «escudo de protección» del planeta.

Un día, creo que de 2018, sentí que tenía que activar la red entera. Fue la primera vez. Entonces hice un ritual en el que pedía a todos los seres Humanos de buen corazón que lo quisieran, se conectaran con la red. Que sería una red de «ayuda mutua» desde el corazón.

Fue precioso. Fue como si millones de pequeñas lucecitas se fueran conectando a la red. Y a medida que esto ocurría toda la red y las lucecitas ya conectadas aumentaban el brillo. Y cada vez todo era más luminoso. Calculé que se conectó, al menos en el área geográfica que yo era «consciente», un 18% de la población Humana. No sé si en todas partes es la misma proporción, es posible que no, pero de todas maneras no diferirá mucho.

Mi “colocón” también fue apoteósico. El AMOR que sentí era inmenso. Pero pasado un rato fui conminado a volver a dejar la red en Stanby, porque era peligroso dejarla activa. Podía ser detectada y neutralizada si estaba demasiado tiempo seguido activa.

Desde entonces la he activado dos veces más para que se “conecten corazones” así de golpe en grupo. Aunque también hay personas individuales que se conectan por su cuenta, guiados por algún Maestro. Ahora debemos andar por el 30% de la población conectada, aunque no lo sepan.

También la he activado un par de veces en momentos críticos de “ataques” exteriores, para “reforzar” las otras redes de protección (escudos).

Durante todo este tiempo he sabido muy poco, precisamente por seguridad. Solo sabia que hay unas cuantas personas más en el planeta que también la gestionan y que activan los cristales de sus áreas de gestión. Y parte de las áreas están solapadas precisamente para permitir la conexión entre las redes de cada gestor. Por seguridad tampoco nos conocemos entre nosotros.

Al principio empecé a pensar que me estaba volviendo loco. Pero un día que estaba activando un cristal estando con un grupo de amigos y yo pensando que no se darían cuenta, vino una amiga que es vidente y me preguntó que estaba haciendo con ese cristal. Me quede a cuadros. Sirvió para que desde entonces confiara en mí y en que no estaba loco, y al mismo tiempo procurar ser más discreto.

Pero hacia febrero del 2022 empecé a sentir que la red debía hacerse pública ya. Igual que se están haciendo ya públicas muchas cosas más del proceso de despertar de la Humanidad. Al principio pensé si sería una trampa de los “oscuros” para delatarme y delatar la red. Pero recibí por distintas vías “de confianza” que mi intuición era correcta. Que ahora precisamente es necesario que se sepa que existe.

Y esta es la razón de escribir este artículo. Hacer pública esta red “Crística”.

Lo de Crística no tiene que ver con religión, tiene que ver con Cristal. Al igual que la expresión “Consciencia Crística”.

De hecho, al escribir el artículo y “recibir” la información para ello, he entendido mucho mejor que es la red y para qué sirve.

También se me ha pedido que muestre «quién soy».

Aunque con respecto a la encarnación, soy un ser Humano normal, como cualquier otro, con sentimientos, miedos, sufrimientos, alegrías y aprendizajes. Cuando «es necesario» tengo abierta la conexión con mi Ser Superior y este «toma el control», llevo a cabo el trabajo que toca ese momento, y vuelvo a la «normalidad».

En otros planos superiores soy un «Merlín», es decir, «un Mago».

Para evitar malentendidos diré que NO soy él Merlín de Avalón y el Rey Arturo.

En realidad, un «Merlín» en las dimensiones 10 y 12, es un «cargo» o «trabajo», como puede ser un agricultor o un Maestro o un administrador.

Mago

Nos dedicamos básicamente a trabajar con materia y energía desde la Voluntad. A través de esa Voluntad podemos manifestar cosas incluso en el plano físico 3D. Por eso hablamos de magia. Pero es mucho más amplio que eso.

Otro trabajo habitual es «limpiar» de oscuros cuando están donde no tienen permiso para estar. Transmutar egrégores negativos en positivos. Manifestar egrégores positivos que ayuden a la Humanidad a elevar su vibración, etc.

Y también ayudar a personas individuales o grupos a transmutar y sanar viejos paradigmas y energías. Siempre respetando de forma sagrada el libre albedrío de las personas.

Y estamos siempre al servicio del Plan Divino allí donde somos necesarios. Y ahora toca aquí.

En otro artículo daré más detalles sobre mi.

Autor: Josep Vergés Fecha: 29/05/2022

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